Las tradiciones de las tribus de Israel

En aquella época era muy notable, en lo que a organización política se refiere, la diferencia entre las tribus israelitas y sus vecinos. En Canaán subsistía el régimen de ciudades-estado, cada una con su propio rey: Jebús, Guézer, Meguido, Taanac, Bet Sean, etc.  En cambio, Israel era un conjunto de tribus independientes cuyo vínculo común no era estrictamente político sino religioso: la fe en el Señor y la noticia trasmitida en las tradiciones ancestrales de algunas tribus de tener un origen común y de haber compartido maravillosas experiencias religiosas, como la salida de Egipto y una larga peregrinación por el desierto, con las tribus hermanas. Esto se refiere sobre todo a las tribus establecidas en el centro y el norte del país, grupo al que se suele designar en la Biblia como “la casa de José”. Los habitantes del sur, aunque tal vez compartían la fe en el Señor, tardarían todavía mucho tiempo es estrechar lazos de hermandad con las tribus del centro y el norte, de las que estaban separados por una importante barrera de fortalezas cananeas: Jebús, Ayalón, Guézer, etc.

En el “Canto de Débora” (Jue 5,1 ss.) se celebra la victoria de Débora sobre Sísara, un jefe del ejército cananeo de Jasor, y en él se dan gracias a Dios y se alaba a las tribus que han acudido a convocatoria para la batalla a la vez que se reprocha a las que no han acudido a la cita. Sin embargo llama la atención el que no se aluda ni en un sentido ni en otro a Judá y Simeón, las tribus del Sur. Si no se las echa en falta es tal vez porque en esa época todavía no se las consideraba plenamente integradas en el conjunto de las tribus israelitas. Cuando los israelitas eran atacados aparecían unos jefes carismaticos, los Jueces, que aglutinaban a su alrededor grupos de gente del pueblo que se encargaran de la defensa. Sin embargo no había una autoridad central constituida, organizada ni estable, y el único motivo para unirse momentáneamente era el hacer frente a algún enemigo común. Por lo que se refiere a los restos arqueológicos de esa época se puede apreciar una cierta diferencia entre las poblaciones “cananeas” y las “hebreas”. La civilización cananea era floreciente, sus casas estaban bien construidas, con pisos pavimentados. Había un sistema de alcantarillado en las ciudades. En cambio, en la construcción de las casas israelitas se recogían piedras y se formaban muros sin poner mucho cuidado en que las hileras quedaran bien asentadas, y para rellenar los huecos se metían piedras más pequeñas. Parece que las ciudades hebreas carecían de una planificación.

En esa época tuvo una notable importancia el santuario de Silo, en el que se guardaba el Arca de la Alianza, que acompañaba al pueblo en sus batallas como signo de la protección divina. Es posible que la actividad cultual de este santuario constituyera un importante elemento de unidad moral para las tribus de la “Casa de José”. La fe en el Señor todavía se mantenía en un nivel muy primitivo, la gente sencilla tenía tendencia a fabricarse ídolos de metal fundido y a tributarles un culto doméstico. Es ilustrativo el caso del hombre de la montaña de Efraim que consagra mil cien siclos de plata al Señor para hacer un ídolo, que puso en un santuario de su propiedad, para cuyo culto logró contratar a un levita (Cf. Jue 17,1‑12). Los propios Jueces protagonistas del libro no son un modelo de comportamiento ético, al menos a la luz de la legislación posterior. Por ejemplo, Sansón se casó con una mujer filistea, no israelita (Jue 14,1‑8). Jefté, por su parte, hizo un voto temerario de ofrecer en sacrificio el primer ser vivo que le saliera al encuentro al regresar a casa para que Yahweh le fuera propicio en la batalla, y lo cumplió sacrificando a su propia hija (Jue 11,31‑39).

2 comentarios sobre “Las tradiciones de las tribus de Israel

  1. El pueblo de israel era muy apegado a las tradiciones principalmente religiosas, que habian heredado de sus ancestros, recordaban con mucha frecuencia las hazañas de sus heroes patriarcales; a diferencia de los cananeos que tenian ciudades- estados, con sistemas politicos y religiosos y cultura diferente a los israelitas.

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